Centros de IVC Evidensia colaboran para salvar a un cachorro con un trastorno congénito

jueves, 28 de julio de 2022

Se trataba de una enfermedad potencialmente mortal que condenaba al animal y a sus propietarios a una atención crónica y a un deterioro progresivo. Para este caso han colaborado veterinarios de la CV Peñagrande, HV Molins, HV Los Tarajales, del HV Privet y del HV del Mar, que han logrado curar al paciente.

“Cota” una perrita golden retriever de seis meses ha salvado la vida gracias a los recursos técnicos y humanos de IVC Evidensia y su trabajo en equipo. El animal estaba afectado por un trastorno congénito vascular diagnosticado como shunt portosistémico intrahepático. Se trata de una enfermedad potencialmente mortal que iba a dejar a la perrita cada vez más dependiente de sus dueños hasta que falleciera.

Afortunadamente, “Cota” fue tratada y curada de esta enfermedad. El animal fue atendido en la Clínica Veterinaria Peñagrande de Madrid, dirigida por Alfredo Fernández, donde Luis Felipe López y Javier Alegre diagnosticaron la enfermedad y localizaron todos los aspectos patogénicos de la enfermedad a través de TACs diagnósticos.

Solo había un problema, la intervención para salvar a “Cota” precisaba de una tecnología muy concreta. Ahí es donde intervino el Hospital Veterinario PRIVET, dirigido por Antonio Rodríguez y también localizado en Madrid. El centro disponía del equipamiento de vanguardia necesario para la operación y, bajo la coordinación de la clínica Peñagrande, se empezaron a mover los hilos para salvar la vida de la perrita.

Para intervenir, se necesitaban cirujanos expertos en este tipo de operaciones. Los encargados de llevar a cabo esta misión fueron Alejandro Artiles del Hospital Veterinario Los Tarajales de Las Palmas de Gran Canaria, Jordi Manubens, del Hospital Veterinario Molins de Barcelona Carles Olmedo del Hospital Veterinario del Mar también de Barcelonaquienes se desplazaron hasta Madrid para operar a “Cota”.

Los expertos aplicaron las técnicas quirúrgicas más modernas y eficaces de tipo intervencionistas, lo que permitió resolver la malformación. El resultado fue excelente. La intervención, que duró más de cuatro horas, permitió resolver la patología vascular y restaurar el estado de buena salud del animal. Después de cuatro días de postoperatorio. Los controles analíticos y la remisión de la sintomatología mostraron una recuperación gradual del paciente.

La vida del cachorro se ha logrado salvar gracias al despliegue que ha hecho el grupo veterinario y el trabajo conjunto de sus expertos.

El caso de “Cota” es un ejemplo de cómo los distintos profesionales y centros de IVC Evidensia colaboran entre ellos cuando un caso lo precisa. El trabajo en equipo entre los distintos centros y personal del grupo ha conseguido que la complicada historia de esta perrita tenga un final feliz. Así nos gusta trabajar en IVC Evidensia y así lo hacemos cada día.